Our Camino must go on



jueves, diciembre 13, 2012

Cruzar la Calle

Todos los días, para llegar a la parada del atobús que me lleva al trabajo me siento como el cangurito de ese juego.



domingo, diciembre 09, 2012

Tai-Chi

Me gusta ver y comparar dos de las caras mas opuestas de Shanghai:  Por un lado están los centros comerciales bulliciosos, con montones de plantas y montones de tiendas en cada planta, con precios (sobre todo en ropa) absolutamente caros, y con gente paseando con sus bolsas llenas de aquí para allá, el olor a comida…  generalmente es la gente joven quien está por allí, trabajadores, comportándose como nuevos ricos y sobre todo consumistas. Pongo aquí un video de uno de los centros comerciales más pequeños que he visto: http://www.youtube.com/watch?v=g8hR3RQXpOw


Y por el otro lado, los más ancianos del lugar, los mismos que no se ven durante el día, comparten su momento matutino de relax sobre las 6 o 7 de la mañana haciendo tai-chi, otros le dan a la cometa, otros simplemente hablan…:http://www.youtube.com/watch?v=NC3W5PeCQvE


Hoy, domingo 9 de diciembre, sobre las 7 de la mañana me he acercado a Zhongshan Park, allí estaban unas 500 personas haciendo tai-chi. No se si me he explicado: domingo, 7 de la mañana, 2ºC de temperatura, medio nieblilla, contaminación del aire en niveles rojos… y el parque lleno.


Lo de la contaminación del aire es una pasada. Hoy estamos en niveles rojos, el medidor marca "solo" 159, ayer llegamos a las 256, es decir, es más saludable fumarse un cigarro que respirar este aire. El tema de la boina de contaminación de Shanghai lo comprobé el otro día cuando entré en autobús en la ciudad: a un lado se veían las afueras de la ciudad, se podía ver que el sol estaba iluminando las montañas y los edificios, al otro lado Shanghai… ya no había sol. Ayer mismo, al mirar a edificios que pueden estar a unos 200 metros de distancia se podía ver una pequeña nieblilla.


Hoy habíamos quedado para jugar a fútbol con unos chinos del curro, pero creo que, al menos por mi parte, no va a ser, al menos hasta que el medidor baje a niveles de contaminación baje un poquito… a la mitad más o menos.


(Por cierto Vikinga, ya ves que he madrugado y que he aparecido por el Parque, por cierto, te he buscado, estabas por ahí haciendo estiramientos? )


lunes, diciembre 03, 2012

Watch watch!?! Massage massage!?! Iphone iphone!?! Sex Sex!?!

 

Este domingo pasado fue día de turisteo, pero a nuestra forma.

Lo primero que quería haber hecho, era ir a algún parque y ver a la gente hacer Tai-Chi de par de mañana,
cosa que no conseguí porque no conseguí levantarme tan pronto. Lo intentaré este fin de semana o el que viene.

Lo segundo que quería haber visto es el Marathon de Shanghái, cosa que tampoco vimos porque por donde queríamos ir de visita el Marathon pasaba muy pronto, vaya que nada.
Lo tercero que íbamos a ver y fue lo primero que vimos fue el Mercado de las Flores y los Pájaros. Muy interesante y con muy poca gente extranjera dentro. Llegamos sobre las 10:30 de la mañana, es decir, que eso estaba lleno
de chinos. Flores vimos que se compraban pocas, y pájaros menos. Lo que mas éxito tenía era la venta de grillos de pelea. Por unos 20 yuanes (2.5 euros) tienes uno, ahora bien, deberás pagar mas si quieres tener un gran campeón que dé dinero en las apues
tas.

Era curioso ver a los hombres chinos, de entre 40 y 60 años, tener un insecto del tamaño de tu dedo índice, y mirarlo y exa
minarlo para ver si lo compran, llegando a haber grandes discusiones entre el comprador, el vendedor y los observadores. También hay gran número de pájaros, peces,… flores
no tantas y comida para los bichos, destacando unos gusanos vivos que creo que también son comestibles  para humanos.
De ahí cruzamos la c
alle y fuimos al mercado de las antigüedades, que vaya antigüedades: las de verdad son carísimas, el 95% de las antigüedades están hechas en los últimos 10 años y entre antigüedad y antigüedad te encuentras cosas que deberían estar en la basura.

Ese era el plan, a partir de ahí el plan dictaba pasear hacia el Este sin rumbo, por la zona antigua de Shanghái. Paseando durante much
os minutos entre tenderetes donde venden el pescado en la calle, la carne, las verduras… cuencos y estanque
s con agua y peces vivos, ranas, culebras, tortugas… condiciones poco higiénic
as diría yo, no creo que una tienda así durara media hora abierta antes de que Sanidad la cerrara para siempre. El dumpling de pan, tamaño grande por 1.5 yuanes (un poco menos de 20 céntimos)

Entramos a algunos mercadillos chinos chinos, y se nos ocurrió que podíamos ir a los Jardines de Yuyuan
para comer uno
s dumplings. Domingo, no llovía, Yuyuan… eso estaba
petao. Media hora de cola para recoger la cajita. Fue divertido ver como los 15 o 20 empleados de la cocina hacian los dumplings a mano y a toda pastilla.
La llegada a Yuyuan Gardens fue casi un shock para nosotros. Habíamos pasado la mañana en mercadillos, en la zona mas china de Shanghái, donde la gente pasea tranquilamente y hace sus compras. De ahí caminamos hacia el punto más turístico (o casi) de la ciudad, ahí es donde dejaron de haber  mercados del día a día y aparecieron los Santa Claus, las imita
ciones, las tiendas con cosas turísticas,… y los pesaos chinos que te asaltan por la calle ofreciéndo
te relojes, masajes, iphones, prostitutas… al tono de: "Watch-Watch, massage-massage, iphone-iphone, sex-sex…" "que no!! Pesao!!"

De ahí nos separamos, Jaro se fue porque había quedado con un amigo que estaba de paso, y yo seguí sin ruta. Entré en un templo Taoísta, bastante chulo aunque nuevo (abandonado en los 60 y restaurado en los 90) y caminando entré en una zona de casas chinas, calles estrechas, ropas tendidas en unos cables que unen una casa con la de enfrente… muy original, muy muy diferente a lo que es el Shanghái moderno, y para mi gusto, mucho mas interesante.
Aún no había dado un paseo lar
go por el Shanghái antiguo y me sorprendió  que haya una zona de esta pequeña ciudad que tenga todavía el estilo de hace un montón de años.

Para el que pregunte por la seguridad, he leído que esta ciudad es muy segura, bastante más que cualquier ciudad española. Por lo que he comprobado, así es, siempre puede haber problemas pero por ahora la impresión que me llevo es mas que grata.

domingo, diciembre 02, 2012

El maravilloso mundo de los paluegos.

Los Paluegos: así denominados a esos maravillosos pedazos de comida que se te quedan entre los dientes y se pueden utilizar para mas tarde, los de la comida se pueden utilizar para la merienda, los de la cena para la recena…

Aquí, no hay día que coma en restaurante y tenga que hacer maniobras imposibles con uno o varios palillos al terminar la comida. Comento las curiosidades que me han pasado comiendo.


El miércoles pasado, en una cena con unos proveedores, fuimos a un restaurante normal, de los que la cena cuesta entre 15 y 25 yuanes (entre unos 2 y 3 euros) y cenamos bien. Fue curioso como una niña de unos 7 u 8 años que estaba por allí se me quedó mirando fijamente, creo que fui el primer occidental que la niña vio (viven en una ciudad muy pequeña, de apenas 800.000 habitantes, para ellos eso es un pueblo). Le lancé una mirada de complicidad y no hubo forma de que me quitara la mirada de encima, los padres se reían a carcajadas, que maja.


Después, en la cena, todo fue bien. Me comentó mi compañero chino de la empresa que los proveedores habían comentado que me defendía bien con los chopsticks (palillos), que no era habitual que los extranjeros tengan esa soltura, a lo que contesté que, si no me quiero morir de hambre, hay que apechugar.

El caso es que una cena con chinos es un reto, primero porque no se puede coger la comida con las manos, no aparece un tenedor a no ser que lo pidas y hay veces que tampoco tienen en el restaurante, y hay que comer, porque si no comes te mueres del hambre.


Lo más común es que en la mesa haya una rueda en medio para que la comida vaya circulando por todos los comensales, en cada sitio hay dos palillos, un platillo pequeño, un vaso que se llena con té o alguna infusión y un bol para el arroz, o algún caldo…


Lo común es no echarte en tu plato, sino picar del plato del medio, y que vaya rulando entre las personas. Es decir, que cuando coges algo del medio con tus palillos,… te están mirando, ahí es donde los que no tenemos mucha destreza la podemos cagar. El otro día intentaba coger un filete cabrón que siempre se escapaba, y mientras se caía una y otra vez el chino que tenía en frente iba diciendo: "no hay problema", "no hay problema", "no hay problema", "no hay problema"… al rato pudo mover la rueda para poder coger algo de comida.


Surgen varios problemas:

·         El primero es el tema de los huesos: todos los platos de carne tienen huesos, es decir, no se ha limpiado la carne de huesos, y a la hora de partirla en cachos pequeños aparecen los huesitos en cada pedazo de carne, y no es nada sencillo sacarte un hueso de la boca usando solo los palillos.

·         Otro son los noodles: esos fideos superlargos que se cogen del plato central para echarlos a tu bol y no tienen fin. Es decir, los coges y levantas el brazo, y cuanto mas levantas el brazo mas largos se hacen los noodles, parecen no tener fin.

·         Los picantes, como no sabemos leer en chino, no sabemos qué estamos comiendo. Generalmente son platos de carne, que más o menos se puede intuir, porque se ven las guindillas o el chile que utilizan. Siempre hay un plato sorpresa que pica, el último fue un plato de verduras,… no me lo esperaba y pasé bastante mal rato.

·         Los brindis: en cenas medianamente serias, todo el mundo tiene que brindar con todo el mundo, así que hay que estar preparado para brindar con todos, como no se chino yo no lanzo brindis, pero es un punto molesto, aunque bonito.

·         El ruido: parece ser que es norma hacer ruido al aspirar la sopa, los noodles,…sluuuurrpp. Es un poco extraño tener una cena con palillos, linda y suave, bien preparada y cocinada, y que sea norma general y bien vista el hacer ruido comiendo.Al principio es un poco desagradable, pero no he tardado tiempo en acostumbrarme.

·         Los paluegos, hay que estar preparado para tener paluegos desde el primer plato de carne. Para sacarlos, la norma dicta que hay que coger el palillo con una mano, enredar entre los dientes y utilizar la otra mano para tapar la boca abierta, con el fin de no ser desagradable a los demás, cosa que me parece lógica siempre que el de al lado no haga ruido sorbiendo sopa.

·         A la hora de sentarse, hay que tener cuidado en dejar el mejor sitio (el que está mirando hacia la puerta) para la persona de mas rango, teniendo a sus segundos mas importantes a su lado. He visto verdaderas peleas ofreciendo el sitio a personas y rechazándolos muchas veces, aunque al final la persona de más rango se sienta ahí.


Aquí en Shanghái, se puede encontrar de todo, hay restaurantes chinos de los baratos, de los que cenas bien por entre 8 y 15 yuanes (entre 1 y 2 euros), con comidas algo mas abundantes se pueden pagar hasta 35 yuanes, incluida la cerveza (unos 4.5 euros). Saliendo de los restaurantes chinos normales (como cualquier bar normal nuestro), y yendo a sitios mas exclusivos se encuentran cenar por 100 o mas yuanes, (a partir de 15 euros). Si se prefieren los sitios más occidentales, hay que soltar algo más de gallina, a partir de 100 yuanes (12 euros), pero como en todos los sitios, depende de lo que quieras pagar.


Lo malo de estos restaurantes baratos es que no suelen hablar inglés, así que para pedir la comida hay que señalarla en el menú, o en la pared, siempre que los hubiera, porque si no mejor salir por la puerta y buscar otro restaurante. Es bastante común que los menús tengan la foto del plato, siempre con una pinta mucho mejor que la que tienen en realidad, pero eso creo que pasa en todos los sitios.


Hoy hemos ido de turismo (ya haré una crónica), y en un sitio en el sitio mas turístico de Shanghái, en un restaurante que había una cola de una media hora para recoger la comida, donde la gente se sacaba fotos con los dumplings que habían comprado o con el cartel… cada ración de 12 dumplings (una especie de empanadilla china rellena de carne) cuesta 20 yuanes (2.5 euros), y con eso te puedes dar por comido.


Aún no he probado cosas desagradables, pero ya he visto en tiendas (y más concretamente en el Carrefour y otros mercados) mogollón de peces vivos que matan en el momento porque para los chinos pescado fresco es pescado vivo. Entre los peces que hay, generalmente son de río, porque hay carpas y pencas, y otros que no llego a reconocer. Como cosas exóticas vivas que hay  para comprar y comer, hay desde cangrejos, los peces, también hay culebras de agua, tortugas y ranas (ver foto). No deja de ser curioso ir al Carrefour y encontrarte ranas enormes esperando que alguien se las coma.


Por mi parte, las ranas, perros, gusanos e insectos tendrán que esperar muuuucho tiempo para que yo tenga estómago para poder comerlos, y espero que sea mucho mucho tiempo.